Todo mi universo está debajo de tu ombligo.
Tengo un grave problema... me persigue su nombre. No puede ser que esté como una estúpida mirando la pelotudez de justo a tiempo y uno de los participantes del reloj se llame igual y el prometido de la pelotuda que juega la carrera también, NO. No da, definitivamente no da. Chau, me voy a dormir la siestonga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario